Un tsunami que se erigió en La Habana pero cuyo epicentro era Colombia conmovía al mundo.
Estábamos en la mente y corazón de millones de personas en el planeta. En justicia y de pie nos ovacionaron con un aplauso mundial.
El 23-J/2016 Colombia puso el punto final a la historia de horror, muerte y destrucción de 52 años de confrontación armada con las Farc- EP.
Vivimos, sin retórica alguna, un momento histórico: el último día de la guerra.
Los combatientes sin distinción de trinchera vistieron el mismo color en sus trajes de fatiga y con un balígrafo ratificaron lo pactado estrechando las manos.
Éramos titular y portada de un trascendental hecho que las agencias de noticias llevaron al mundo entero en textos, vídeos e imágenes.
A Colombia llegaba un barco de La Habana cargado de grandeza humana.
Porque se necesita mucha sensatez y sentimientos para poner por encima del dolor, del rencor, del odio, del miedo y de la incertidumbre, el interés por el Otro y los Otros y con convicción pactar el cese bilateral al fuego para encumbrar el sueño superior de paz y alcanzarlo.
Eso fue lo que hicieron nuestros representantes institucionales del Estado en la Habana y los combatientes delegados de las Farc-EP desde noviembre de 2012.
Conversar, conocerse, mirarse a los ojos, construir confianza y decir ¡ya basta!
Terminó el pretexto llamado conflicto armado que impedía reenfocar recursos financieros, técnicos y talento humano para zanjar la pobreza, la exclusión y la inequidad de oportunidades entre los colombianos.
Ojalá la “señora de la guadaña” no venga a meter sus narices en estos buenos y nuevos días, ni se deje corromper, otra vez, por el fanatismo político, el odio y la perturbación mental de algunos.
Este texto recoge algunos titulares y textos en español de algunos medios del continente y algunos nacionales del 23 de junio de 2016 cuando cesó la horrible (Uribe) noche e inauguramos el nuevo libro de nuestra historia.
El Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, aseguró este jueves que el acuerdo de alto el fuego bilateral alcanzado en La Habana con el jefe supremo de las FARC, Timoleón Jiménez, conocido también como Timochenko, significa el fin del grupo como grupo armado.
"No solamente se acordó el fin de las confrontaciones, sino que también se definió un cronograma preciso para que las FARC dejen las armas para siempre. Esto significa ni más ni menos el fin de las FARC como grupo armado”, dijo Santos desde La Habana, donde asistió a la firma del acuerdo.
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“Los colombianos hemos convivido con el
miedo y la incertidumbre de la guerra. Se volvió parte de nuestra vida
cotidiana. Con lo que se acaba de firmar, damos la vuelta a una página trágica
de nuestra historia, esto nos permitirá no repetir lo que tanto daño nos
causó.Llegó la hora de ser un país con esperanza”.
El presidente de Colombia
Juan Manuel Santos sintió que hablaba por todos al sellar con las FARC los
acuerdos del alto el fuego y las hostilidades bilaterales.
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"Colombia se situó ayer más cerca que nunca de firmar la paz con el histórico acuerdo de poner fin al conflicto sellado en La Habana ante el presidente Juan Manuel Santos y el líder de las FARC, Rodrigo Londoño Echeverri, alias “Timochenko”, y con el espaldarazo de la comunidad internacional".
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El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, partió este jueves 23 de junio a Cuba para asistir a la firma del acuerdo sobre el cese al fuego bilateral y definitivo con las FARC, principio del fin de medio siglo de conflicto armado con esa guerrilla.
Colombia y los rebeldes de las FARC se acercan a un acuerdo de paz FARC y gobierno de Santos logran acuerdo para fin del conflicto armado Ban estará en firma del cese al fuego entre las FARC y Gobierno colombiano “Rumbo a La Habana a silenciar para siempre los fusiles. SíALaPaz”, escribió en su cuenta en Twitter el mandatario, que desde que asumió el poder en 2010 impulsa un acuerdo de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), principal y más antigua guerrilla del país.
La Habana.- El Gobierno de Colombia y las FARC firmaron hoy en La Habana el pacto para preparar el fin del conflicto en Colombia, que incluye el cese al fuego bilateral y definitivo, la dejación de armas, garantías de seguridad y el mecanismo de refrendación de los acuerdos de paz.
Tras ser suscrito por los negociadores del Gobierno y de la guerrilla y los representantes de los países garantes y acompañantes, el presidente de Cuba, Raúl Castro, entregó el documento a su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, y al líder de las FARC, Rodrigo Londoño, alias “Timochenko”, quienes se estrecharon la mano bajo el aplauso de los asistentes.
Bogotá. Durante años fueron enemigos. Pero a partir de este jueves el presidente Juan Manuel Santos y el jefe máximo de la guerrilla FARC, 'Timochenko', pasarán a la historia por su determinación para alcanzar la paz en Colombia tras medio siglo de enfrentamientos.
Colombia y las FARC firmaron el alto el fuego definitivo en un histórico acto en La Habana.
El Gobierno del presidente colombiano Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) firmaron hoy en La Habana un acuerdo histórico de cese del fuego bilateral y definitivo que incluye la "dejación" de las armas por parte de la guerrilla.
El acuerdo fue refrendado por Humberto de la Calle, jefe negociador gubernamental, y por el jefe guerrillero Luciano Arango, alias "Iván Márquez", en presencia del presidente Santos y el jefe de las FARC Rodrigo Londoño, alias "Timochenko".
El gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC sellaron este jueves un histórico acuerdo de cese al fuego y desarme bilateral y definitivo, un paso crucial hacia el fin del conflicto armado más antiguo de América.
"Hoy es un día histórico para nuestro país: después de mas de 50 años entre muertes, atentados y dolor hemos puesto un punto final al conflicto armado con las FARC", dijo el presidente Juan Manuel Santos, quien desde que asumió el poder en 2010 impulsa la paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas).
El gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC oficializaron el jueves el abandono de las armas por parte de los rebeldes.
El anuncio fue hecho por los delegados de los países garantes, Cuba y Noruega, en presencia del presidente colombiano Juan Manuel Santos, el máximo jefe de las FARC Rodrigo Londoño o "Timochenko" y el secretario general de Naciones Unidas Ban Ki-moon, entre otras personalidades.
El gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC anunciaron este miércoles un acuerdo de cese del fuego, el primer paso del fin de un enfrentamiento entre las partes que marcó la historia de la nación sudamericana y que dejó miles de víctimas y pérdidas materiales.
“Las delegaciones del Gobierno Nacional y de las FARC-EP informamos a la opinión pública que hemos llegado con éxito al Acuerdo para el Cese al Fuego y de Hostilidades Bilateral y Definitivo; la Dejación de las armas, las garantías de seguridad y la lucha contra las organizaciones criminales responsables de homicidios y masacres o que atentan contra defensores de Derechos Humanos, movimientos sociales o movimientos políticos”, expresó un comunicado conjunto de las partes leído en esta capital por uno de los negociadores rebeldes.
EL PAÍS - Uruguay
El gobierno de Colombia y las FARC firmaron este jueves en La Habana el pacto para preparar el fin del conflicto en Colombia, que incluye el cese al fuego bilateral y definitivo, la dejación de armas, garantías de seguridad y mecanismo de refrendación de los acuerdos de paz.
Tras ser suscrito por los negociadores del gobierno y de la guerrilla y los representantes de los países garantes y acompañantes, el presidente de Cuba, Raúl Castro, entregó el documento a su homólogo colombiano Juan Manuel Santos y el líder de las FARC, Timochenko, quienes se estrecharon las manos bajo el aplauso de los asistentes.
La ONU recibirá y destruirá las armas de las FARC en Colombia. EEUU ya ha felicitado a Colombia por el acuerdo, según informa la agencia de noticIas AFP.
El presidente colombiano
Juan Manuel Santos y la guerrilla de las FARC sellaron este jueves el acuerdo
del cese bilateral y definitivo del fuego, el paso previo para dar por
terminado un conflicto armado y político que lleva más de medio siglo y ha
dejado unos 220.000 muertos.
El acuerdo, firmado ante el
secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y varios presidentes de
América Latina, establece el cronograma y los procedimientos para que los
rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se
concentren en zonas específicas y entreguen las armas a la ONU como parte de su
transición a la política.
El presidente colombiano Juan Manuel Santos y los terroristas de las FARC sellaron hoy el acuerdo del cese bilateral y definitivo del fuego y el abandono de armas de los terroristas, dos pasos previos para dar por terminado un conflicto armado y político que lleva más de medio siglo y ha dejado unos 260,000 muertos.
El anuncio fue hecho por los delegados de los países garantes, Cuba y Noruega, en presencia de Santos, el máximo cabecilla de las FARC, Rodrigo Londoño o "Timochenko", y el secretario general de Naciones Unidas Ban Ki-moon, entre otras personalidades.
“Hoy es un día histórico para nuestro país después de más de 50 años de enfrentamientos, muertes, atentados y dolor. Hemos puesto un punto final al conflicto armado con las FARC”, señaló el mandatario.
El acto para oficializar el acuerdo de cese al fuego bilateral y definitivo en Colombia comenzó en La Habana, encabezado por el presidente Juan Manuel Santos y por "Timochenko", máximo líder de las FARC, y con la asistencia de seis presidentes de la región y el secretario general de la ONU.
Una nueva era se abre paso en Colombia. Después de más de 50 años de conflicto, el Gobierno de Colombia y las FARC han firmado un cese al fuego bilateral y definitivo, la antesala de un acuerdo de paz con la guerrilla más antigua de América Latina que se producirá, casi con toda seguridad, antes de que acabe el verano. A partir de entonces, se implementará la tregua, la concentración de los guerrilleros y la dejación de las armas, que serán fundidas por la ONU para crear tres monumentos.
El gobierno del presidente Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) refrendaron este jueves en La Habana, Cuba, un acuerdo histórico de cese el fuego bilateral y definitivo para poner fin al conflicto interno que vive ese país desde hace de 52 años.
Luego de tres años de negociaciones, el mandatario colombiano y el líder de las FARC, Rodrigo Londoño Echeverri, alias Timochenko, firmaron este acuerdo con miras a poner fin al que se considera como el conflicto armado interno más antiguo de América Latina.
Este 23 de junio Colombia dio un paso histórico con un acuerdo sobre uno de los puntos más importantes de la agenda de negociación entre el Gobierno y la guerrilla de las FARC: el fin del conflicto armado.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, dijo durante el evento que el conflicto ha durado más de 50 años y que hay generaciones enteras acostumbradas a la guerra que no han conocido un solo día de paz. "¡Nos llegó la hora de vivir sin guerra! ¡Nos llegó la hora de ser un país en paz, un país con esperanza!", expresó.
No fueron pocos los que en aquellos días
vaticinaban el fracaso, como ya había ocurrido en Colombia con anteriores
procesos de paz. Sin embargo, los trascendentales acuerdos que hoy se han
anunciado por la Mesa nos acercan, como nunca antes, al fin del conflicto
armado que por más de cinco décadas ha sufrido el hermano pueblo colombiano.
EL ESPECTADOR - Colombia
El presidente Juan
Manuel Santos, en el discurso reconoció que subsisten fenómenos criminales
relacionados al narcotráfico pero que es necesario reconocer que se terminó la
guerra con la guerrilla más antigua del mundo
"Esta es la paz de todos sin excepción. Y gracias a
Dios ya no es un sueño. La paz se hizo posible. La paz es posible. Ahora, vamos
a construirla".
REVISTA SEMANA - Colombia
El 23 de junio de 2016 queda como una fecha histórica para
Colombia. El Gobierno y las FARC dieron el salto más importante en casi
cuatro años de negociación que, de una vez y por todas, pondrá punto final a la
violencia.
EL COLOMBIANO - Medellín, Colombia
El presidente de la República, Juan Manuel Santos, anunció este jueves desde La Habana en la firma del acuerdo del punto 3 del fin del conflicto, que comprende un cese bilateral de hostilidades, la dejación de armas y las zonas de concentración, que el acuerdo final se firmará en Colombia y no en Cuba como se viene haciendo (Lea: Con este balígrafo se firmará el acuerdo de paz)
“Quiero ser muy claro en que todavía faltan temas importantes por acordar, y hemos convenido con las Farc que vamos a evacuarlos lo más pronto posible. El acuerdo final lo firmaremos en Colombia”, indicó el Jefe de Estado, muy emocionado por los acuerdos alcanzados este jueves en la mesa.
“Hoy es un día histórico para nuestro país”, dijo el presidente al resaltar que han sido más de 30 años de intentos para lograr la firma que hoy se dio y que posibilitará la firma del acuerdo final y la construcción de la paz.
Con un histórico apretón de manos entre el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y el jefe de las Farc, Timoleón Jiménez, se acordó el fin de la guerra de más de 50 años que ha vivido Colombia. Rodolfo Benítez, representante del gobierno de Cuba, fue el encargado de leer el acuerdo alcanzado por las partes. Lo hizo en el salón de protocolo de El Laguito, en La Habana (Cuba), y ante los ojos del secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, de cinco presidentes y una delegación del Gobierno, Congreso, gremios y decenas de periodistas que fueron testigos del trascendental momento. Estas fueron las reacciones de los colombianos en las calles durante la firma del fin del conflicto.
EL INFORMADOR - Santa Marta, Colombia
El conflicto político dejó más de 220.000 víctimas fatales y desplazó a millones de campesinos a las ciudades desde que iniciaron las hostilidades en 1964.
"Las delegaciones del Gobierno Nacional y de las Farc-EP informamos a la opinión pública que hemos llegado con éxito al Acuerdo para el Cese al Fuego y de Hostilidades Bilateral y Definitivo; la Dejación de las armas, las garantías de seguridad y la lucha contra las organizaciones criminales responsables de homicidios y masacres o que atentan contra defensores de Derechos Humanos, movimientos sociales o movimientos políticos", expresó un comunicado conjunto de las partes leído en esta capital por uno de los negociadores rebeldes.
El Gobierno Nacional y las Farc firmaron este jueves en
La Habana el pacto para preparar el fin del conflicto en Colombia,
que incluye el cese al fuego bilateral y definitivo, la dejación de armas,
garantías de seguridad y mecanismo de refrendación de los acuerdos de paz.
Tras ser suscrito por los negociadores del
Gobierno y de la guerrilla y los representantes de los países garantes y
acompañantes, el presidente de Cuba, Raúl Castro, entregó el documento al
mandatario Juan Manuel Santos y el jefe de las Farc, Rodrigo Londoño Echeverri,
alias de ‘Timoleón Jiménez’ o ‘Timochenko’, quienes se estrecharon las manos
bajo el aplauso de los asistentes.
Dentro del acuerdo quedó establecido que la
Organización de Naciones Unidas recibirá la totalidad de las armas de las Farc
tras su dejación para su destrucción y la construcción de tres monumentos con
lo que quede de ellas.
“Esta es una proyección irreversible de que el acuerdo final de paz será firmado de manera muy pronta”.
Así lo afirmó el jefe negociador del Gobierno Nacional en los diálogos de paz con las FARC en La Habana, Humberto de la Calle Lombana, en la rueda de prensa al final del acto protocolario de este jueves, en donde se reveló el contenido del acuerdo sobre el cese del fuego y de hostilidades bilateral y definitivo.
“Hemos doblado definitivamente la página de 52 años de conflicto armado. Hemos zanjado el mecanismo de refrendación: el Gobierno y las FARC se atendrán a lo que decida la Corte Constitucional, lo que decida la Corte será aceptado categóricamente por ambas partes”, dijo De la Calle.
Hoy se pactó en La Habana
el cese el fuego bilateral y definitivo entre el Gobierno y las Farc, lo que le
pone punto final a una guerra interna de más de 50 años.