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jueves, 20 de enero de 2011

#ApoyoaClaudiaLopez


Claudia López, Foto by Bun Diciembre 2008
El lunes 24 de Enero a las 9 de la mañana en el juzgado 23 Penal Municipal de Bogotá arranca el juicio contra la columnista Claudia López http://ow.ly/3GUz0 
Como ella, tampoyo yo veo en Ernesto Samper Pizano “al político capaz de venderse a la mafia para acceder a la Presidencia (algo que todos sabemos, pero que la justicia comprada en el Congreso evitó juzgar), de corromper las instituciones para imponer a Serpa como sucesor (como todos lo padecimos, pero logramos evitar), de pedir cacao para que no extraditaran a los Rodríguez Orejuela (como consta personalmente a Uribe) y sabrá Dios si habrá intercedió también en los planes para eliminar a quienes pudieron ser piezas clave para develar sus andanzas, como la ‘monita retrechera’ y el ex conductor de Serpa”. http://ow.ly/3FnGi
Adhiero a la pregunta que Gonzalo Guillen @HELIODOPTERO le hacía a Claudia López en Twitter “@CLOPEZanalista ¿Por qué te acusa Samper a ti de algo que es vox pópuli y coincide con lo que otros publicamos desde hace 15 años?”. Y no solo lo que se publicó, sino lo que miles de personas pensamos y sabemos que sucedió.

Lo deseable es que este juicio no implique un desgaste innecesario para el poder judicial y para la acusada como ocurrió con Alfredo Molano. Hace apenas un año atrás, y luego de tres tediosos años atendiendo diligencias de un proceso costoso emocional y financieramente hablando para el implicado, y qué decir para el Estado (según nos hace caer en cuenta María Teresa Herrán en su libro Acallar la opinión? Cuatro Araújos versus Alfredo Molano), y harto absurdo y “Kafko-costumbrista” como lo calificó el poeta Juan Manuel Roca, el escritor y periodista Alfredo Molano Bravo fue absuelto en juicio oral de los cargos de calumnia e injuria con lo que se pretendía acallarlo  http://ow.ly/3GNbP el 9 de febrero de 2010.

Pero está visto que hablar con la verdad puede significar recibir una amenaza, una agresión y hasta perder la vida misma, o llegar a los estrados judiciales por cuenta de quienes se sienten aludidos, afectados o implicados, y pretenden –por ahora sin suerte-, convertir el pensar y opinar con independencia en delito. 

Aunque la autocensura, la intimidación y el miedo son condiciones casi que naturales en las que se ejerce el periodismo y la libertad de expresión en Colombia, no lo es para la investigadora y politóloga Claudia López quien forma parte de ese selecto y creciente número de periodistas y opinadores que ni con amenazas, acoso judicial, intimidación, señalamientos o demandas han conseguido acallar sus voces.

Y es que, como advierte la FLIP, de manera creciente “las acciones penales por injuria y calumnia se están utilizando como una forma de limitar opiniones, e incluso, en algunos casos, para silenciar críticas sobre la actuación de funcionarios públicos y personas influyentes en el país. Si bien es claro que se pueden presentar tensiones entre la libertad de opinión y el derecho a la honra y el buen nombre, preocupa que se enjuicien opiniones y expresiones, cuando la jurisprudencia vigente ha establecido claramente que debe tratarse de hechos e imputaciones concretas”.

Pero ni El Tiempo con su plan Planeta consiguió, con su despido  hace meses atrás, silenciar la opinión clara y crítica que, con tanto talento como cojones (¿debería decir ovarios?) se levanta para seguir señalando, de manera documentada y con lujo de detalles, los abusos y maniobras del poder que por igual ejercen legales e ilegales en el país.   


Es mucho lo que el país político y la sociedad le debemos con su trabajo  a Claudia López. En 2005 tiró del telón  para que pudieramos ver la tras escena de cómo el Acuerdo de Ralito se cumplió para que mafiosos, narcotraficantes, terratenientes, empresarios, políticos etc., etc. se repartieran en 2002 el botín electoral que permitió el ascenso al Congreso de la República del proyecto político narco paramilitar, comúnmente conocido como la parapolítica y, desde entonces, hacer de Colombia la debacle.

La acusación de injuria y calumnia contra @CLOPEZanalista es un atentado a libertad de opinión como derecho preferencial por encima de todos los derechos fundamentales y reconocido en el ordenamiento jurídico nacional e internacional.

La Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948). Art.19. señala que "todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión".

El Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (1966), jurídicamente vinculante para todos los Estados que han firmado y ratificado sus provisiones dice en su Art.19 que "(1) Nadie podrá ser molestado a causa de sus opiniones. (2) Toda persona tiene derecho a la libertad de expresión; este derecho comprende la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de toda índole, sin consideración de fronteras, ya sea oralmente, por escrito o en forma impresa o artística, o por cualquier otro procedimiento de su elección.

La Constitución Política de Colombia en su Art. 20. señala que “Se garantiza a toda persona la libertad de expresar su pensamiento y opiniones, la de informar y recibir información veraz e imparcial, y la de fundar medios masivos de comunicación. Estos son libres y tienen responsabilidad social. Se garantiza el derecho de rectificación en condiciones de equidad. No habrá censura”.

Como señaló el  Relator Especial de Naciones Unidas para la Libertad de Opinión y Expresión el guatemalteco Frank La Rue Lewi, “el principio de la libertad de expresión es que no debe haber ninguna censura, ninguna forma de censura”. Los controles “deben ser personales y éticos, deben ser internos, no del Estado, no de mecanismos del Estado”. El Estado “únicamente debe garantizar la libertad total de expresión”. “La opinión no necesita pruebas en el caso de los columnistas. El columnista está expresando su opinión personal y su análisis personal. De hecho, la opinión nunca necesita pruebas. Esa es la diferencia entre ejercer la libertad de opinión y ejercer la verdad de un proceso. Los hechos que uno documenta en un proceso legal tienen que ser probados”. http://ow.ly/3GV8v

En la Providencia del fallo que absolvió a Alfredo Molano (N.I.64666 Caso 115-2008) el Juez Penal Municipal José Eduardo Saavedra señala que, “la libertad de opinión contribuye decididamente a la creación de espacios plurales dentro de la sociedad. Mediante la opinión se genera debate sobre la apreciación que la sociedad tiene sobre distintos hechos. Es por ello que la sociedad tiene la carga de soportar opiniones que causen molestia o afecten el amor propio de las personas. La libertad para expresar y difundir pensamiento y opiniones, permite, por lo mismo, cuestionar y criticas directamente, inclusive llegando al nivel de la exageración y la mortificación, diversos hechos, conductas y personas en la sociedad”.

#ApoyoaClaudiaLopez es una Campaña mediante la cuál la Comunidad de Twitter busca expresarle a Claudia López que no está sola. Que son muchos más los que pensamos y creemos en la necesidad y valor de su palabra, de su opinión. También porque defendemos nuestro propio derecho a la libertad de expresión y de opinión, al derecho a la información como nuestros en una sociedad en la que, por lo pronto, optó como modelo político, el de la democracia.

También, porque, como escribió “el maestro de maestros” de la investigación y la sociología en el país, Orlando Fals Borda, Colombia “necesita que se diga la verdad, así sea dolorosa, y aunque produzca serios inconvenientes a aquellos que se atreven a decirla”. 

Deseo que esta reflexión ayude por lo menos a que Nelson Moreno (@nomorenelson) encuentré algunas respuestas a su pregunta en Twitter : “por qué será que los periodistas que valen la pena son los perseguidos y/o amenazados?”.


Fotos by Bun protegidas con DA. Muros Cra.7 Calle 26, 2008 y Calle 61 Cra. 12, 2010 Bogotá D.C.

jueves, 13 de enero de 2011

No vayan porque hay un muerto en el camino, y el pescador fue

Mateo y Margarita tenían la misma edad de mis sobrinos que están próximos de recibirse como profesionales. Esa exquisita edad en la que sentimos que ya tenemos todo en la mochila para andar la vida sin tapujos, libres, osados, felices, cargada de futuro y de besos. Soñamos, inventamos y nos reinventamos con una facilidad inaudita convencidos de que, con nuestro accionar, cambiaremos todo cuanto haya que cambiar a nuestro alrededor, el mundo si fuera necesario!, para que todos quepamos en él y seamos por siempre felices.

Atardece en el Mar Caribe. Enero 2011
Mateo y Margarita sabían de sobra lo que yo aprendí gracias a ellos hace un momento y es que,  por entre el llano abierto, las serranías, cuencas, los montes, las ciénagas, las quebradas, los ríos, los valles y los bosques de caobos, cedros, cocos y almendros del departamento de Córdoba, podrían toparse con venados, osos, manatís, tortugas, monos, micos, águilas, azulejos, mirlas… todos, habitantes naturales de la que se considera  una de las mayores concentraciones de fauna y flora nativa de Suramérica.

Mateo y Margarita seguro que también sabían que el territorio del Ubérrimo ha sido el escenario de guerra, muerte y destrucción más despiadado en los últimos 30 años en Colombia. Que allá surgió el paramilitarismo (Autodefensas Unidad de Colombia AUC) de Carlos Castaño y familia, y financiadas por ganaderos, hacendados, terratenientes, comerciantes propietarios de empresas nacionales y algunas multinacionales, como el brazo ilegal del Estado, para enfrentar, de manera ilegal también, a las guerrillas de las FARC, ELN y EPL, y que también tuvo lugar el  Pacto de Ralito, (acuerdo criminal secreto, 2001) que llevó al poder al paramilitarismo y a la debacle desinstitucional del país. Que siempre han convivido narcos, paracos, guerrillos, ejército y empresarios haciendose pasito por el control de uno de los territorios más ricos del país por donde se le mire.

Mateo y Margarita seguro escucharon hablar de las escalofriantes historias de terror y dolor en  Córdoba, departamento con el mayor número de delitos de lesa humanidad entre masacres y asesinatos selectivos cometidos en los últimos veinte años  en donde centenares de miles de  campesinos, mujeres y niños indefensos fueron acribillados con motosierras después de execrables torturas o asesinados con tiros de gracia como a ellos. http://ow.ly/3CWZY 

Mateo y Margarita quizás, fueron persuadidos por sus familiares y amigos más cercanos de no andar solos por ahí y menos haciendo videos y fotos para evitar un atraco callejero, pues como muchos ,aún creyeron que la seguridad democrática había terminado con el crimen organizado y que, de verdad, verdad, en tierra del Ubérrimo no habían más paramilitares, sino una que otra  -como distractoramente llaman hoy - BACRIM, banda de criminales que para el efecto es lo mismo.

Mateo y Margarita fueron a mojar sus pies, desnudos, entre besos y sueños acariciados por los vientos que soplan en el San Bernardo del mar Caribe,  seguros de la promesa de vida que los acompañó hasta el último momento de su planeado y soñado encuentro con la naturaleza que en breve los separaría, pero solo por un tiempo, mientras Mateo concluía sus prácticas y se recibía como biólogo profesional.  

Callaron a dos pajaros libres.  Los separaron para siempre y juntos.

“Todo apunta a que fue una equivocación. Los asesinaron porque los confundieron con agentes del Estado”, declara ante los medios el comandante regional de la Policía Nacional General Luis Alberto Pérez. 

¡Qué imbécil! Pero eso es este país de mierda. Un General de la República que se atreva a decir semejante insensatez: se confundieron, se equivocaron de muerto. Legitimando así el asesinato, el homicidio, la ejecución, la eliminación del Otro y de paso poniéndole un precio. Murieron por una bala perdida.
Print Pant de lo que creo era la cuenta de Mateo.

No salgo del espanto y el asombro. Por la vileza  y sevicia del crimen. Por el territorio a donde se produce este abominable hecho. Por el mensaje simbólico que tiene. Por los miles de Mateos y Margaritas anónimos que siguen siendo asesinados en el país. Porque la Vida es Sagrada, la de todos y cada uno, los buenos e incluso los más malos y cutres de la sociedad. 

No vayan porque hay un muerto en el camino, y el pescador fue. Encontró a dos jóvenes con un tiro de gracia en la cabeza de cada uno.

Una vez más, como después de cada asesinato, y en un ritual que me ha acompañado en los último 30 años, pido perdón a los niños y jóvenes por la infinita ineptitud, egoísmo y estupidez humana de los adultos de este país, por nuestra incapacidad de parar el asesinato, la muerte, la barbarie, el desangre humano negándonos con sus muertes el futuro.

Hay que hacer lo que hizo el pescador que encontró a Mateo y Margarita: ir y mirar con los ojos abiertos esta tragedia que se repite una y otra y otra vez, talvez, porque no la vemos con el corazón ni desde el alma humana sino desde las estadísticas. Quizás podamos alguna vez despertar para no tolerar una asesinato más.

En Memoria de los jóvenes colombianos Margarita Gómez Gómez y Mateo Matamala Neme, asesinados en el Municipio de San Bernardo del Viento, Córdoba y sepultados el 12 de enero en Bogotá.

martes, 11 de enero de 2011

Ser nación y no solo país

Foto by @Bunkerglo - Enero 11 de 201
Amotinados, molestos, con frio y hambre esperan su turno para recibir la ayuda (limosna) que cada tres meses, en principio, entrega el gobierno de turno. “La ficha mía es la 82.000”. “La mía la 20 mil”. Pero ninguna de estas dos personas sabía en qué número de turno iba la atención en Acción Social en la sede de las Consejerías cerca al Palacio de Nariño. Entonces, cuánto tiempo más esperaran, les pregunté. “Yo tengo ese turno desde septiembre que me lo dieron, así que debo venir con frecuencia para saber si me van a llamar”. Hay ancianos y niños. Los primeros en silencio, inmóviles. Los segundos corren, saltan, ríen porque les gustan las escalinatas de ese parque que bordea el Archivo Nacional sobre la avenida José Asunción Silva. 
Vienen y van, desde el Parque del Tercer Milenio a donde tienen armados los cambuches de la supervivencia, hasta la oficina gubernamental de esta avenida. Pero son menos que menos. No tienen información. No son escuchados. No son atendidos. Solo son escoltados por las jaulas negras de la policía. Tampoco alcanzan a imaginar que seguramente les llegaran “competidores”, los últimos y nuevos desplazados. Sigo mi camino apesadumbrada después del breve contacto. Nada puedo hacer con que no sea darles una buena idea para una acción estruendosa para que los escuchen.
En cuestión de días Colombia pasó de estar inmersa en la retórica de la crisis de derechos humanos porque la vida era aniquilada con motosierras, a la retórica de otra crisis no menos humanitaria de iguales proporciones en su urgencia y que compromete los derechos fundamentales. Quizás sean las mismas personas: los más pobres y excluidos, los ninguneados de 129 municipios rivereños del Magdalena que están con el agua al cuello.   
Foto by @Bunkerglo - Enero 11 de 2011
Parece una condena, pero somos un país de victimas. Más de 4 millones de personas son las víctimas del desplazamiento forzado interno que viene dejando la violencia del conflicto armado, de paramilitares, de agentes del Estado. Ahora, más de 4 millones de personas son víctimas de un nuevo desplazamiento forzado interno, el del invierno. Niños, jóvenes y mujeres, familias que han perdido todo y para quienes antes del invierno el Estado tampoco había llegado.
Le estalló a Santos una crisis humanitaria, social y económica profunda. Debe ocuparse y atender a las víctimas de un país en guerra cuyos campos agrícolas y carreteras fueron arruinados por acción del agua. Unas y otras requieren lo mismo: vivienda, alimentación, agua potable, servicios básicos, salud, educación, trabajo y esparcimiento… Todos, derechos fundamentales que a algunos se los arrebató la violencia y a otros la inclemencia invernal. El sufrimiento y la precariedad salta a la vista en una sociedad civil que parece no querer ver a su alrededor, y que han reducido su sentido humano y solidario a un mercado, a una colchoneta o a un cheque mientras el Estado, el mismo que no ha querido asumir de fondo y en serio la atención a las víctimas de la violencia, siempre ha invisibilizado rostros de la miseria y la pobreza de los destechados entre cifras, curvas y porcentaje. ¿Será que al fin llegó el momento para que los colombianos entiendan con las personas en situación de desplazamiento por el invierno lo que ha sido imposible que comprendan de las que  han sido desplazadas por la violencia en los últimos 50 años y más?

Foto by @Bunkerglo - Enero 11 de 2011
Quizás no perdamos este momento de ser Nación y no solo país, y el liderazgo que pretende construirse desde la actual presidencia le plantee al país, por primera vez, un proyecto común, un ideal de nación, un pacto social que haga que cada uno de los colombianos asuma de manera práctica,  efectiva y eficiente un rol, una tarea, un hacer con el Otro y para el Otro, para esos 8 millones de personas y más a las que se debe comenzar a respetar y garantizar sus derechos humanos y fundamentales. Gobernar en democracia es atender y dar respuesta a las necesidades de los más vulnerables, de los más débiles de la sociedad. Se gobierna para ellos, para nadie más.

lunes, 10 de enero de 2011

Uribe se pasó otra vez de la raya con @DCoronell


Cuanto se ataca, persigue y agrede a un periodista, se atenta contra el derecho de acceso a la información veraz y equilibrada a la que tenemos en toda la sociedad. 

Es bien conocido el ataque, seguimiento y persecución de Uribe presidente contra los periodistas que lo controvirtieron, y de manera evidente contra @DCoronell. 

Durante los ocho años en función presidencial, y después de que el periodista regresará de un exilio de dos años fuera del país por amenazas contra su vida y la de su familia entre 2007–2010 por parte del Departamento Administrativo de Seguridad #DAS bajo la responsabilidad directa de Uribe presidente, se ejerció de manera ilegal espionaje telefónico y hostigamiento permanente contra el periodista. 

Estos hechos que vulneran la libertad de prensa, el derecho a la información, la libertad de  expresión y la sagrada privacidad del periodista, son materia de investigación  judicial y más temprano que tarde se demostrará su responsabilidad directa. 

No fueron pocas las declaraciones y señalamientos que Uribe hizo contra los periodistas a los que llamó “aliados del terrorismo”. Sin embargo, lo que la sociedad no puede tolerar más, y menos los comunicadores y periodistas en un país que se declara democrático, es que un ex funcionario de Estado y subjudice, difame, insulte y ataque a ningún periodista en el ámbito de lo público y tampoco en el privado, por el hecho de que se publique y cuestionen hechos  de su responsabilidad que vulneran a la sociedad, a la Nación y al Estado colombiano. 

Es inaceptable el lenguaje pendenciero e irresponsable en el espacio mediático de los Twitter de Uribe, no solo porque acusa sin prueba alguna, sino porque además, abre la posibilidad de  sostener una comunicación entre iguales y en los mismos términos utilizados por él. 

Así como dice “PeriodistaMafioso ahora hace teatro con persecución: sicario moral, mentiroso redomado”, también me permite tener el mismo trato para decirle “ExpresidenteMafioso ahora hace teatro con persecución: sicario moral, mentiroso y triple redomado”, todo lo cual no conduce a nada distinto que a romper el cuidadoso respeto con el que millones de usuarios de la comunidad Twitter se comunica y se refiere, en el caso de Colombia, a sus más urgentes asuntos y preocupaciones. 

Uribe puede decir hasta misa, pero lo que no puede hacer es aprovecharse de su condición de ex presidente para lanzar acusaciones y calificaciones sin prueba alguna, nada más, para estar "vigente" en la comunidad Twitter ya que, en apariencia, los medios le dan menos chico. Esto más bien indica, de algún modo, que la justicia está más cerca de confirmar su directo involucramiento en los hechos ilegales del #DAS

Nunca le funcionó como gobernante, y ahora mucho menos. 

Uribe se equivoca de cabo a rabo creyendo que, con insultos e injurias, amedrantará y conseguirá que el periodismo independiente y crítico se callé o ejerza la autocensura. La sociedad no dejará de exigir su derecho a estar informado, tal y como nos lo garantiza con su actividad periodística Daniel Coronell: informando de manera documentada, clara y equilibrada acerca de los asuntos de interés público que son  todos los asuntos de la sociedad. 

Los ciudadanos colombianos en general y de manera particular los que se interesan por la situación de los periodistas en el país, los periodistas usuarios y miembros de la comunidad de Twitter, rechazamos contundentemente que Uribe Vélez, luego de perder el poder que le otorgaron los medios análogos durante ocho años quiera hoy hacer lo mismo que nos tocó aguantarle como presidente: insultar, amenazar, maltratar, descalificar y acusar de terrorista a todo aquel que piense diferente a él o lo cuestione por sus actuaciones (materia de eterna investigación). 

Uribe Vélez no es nada más que un ex funcionario del Estado que debe someterse a la ley, pero también a todas las normas y en Twitter así no le guste, las hay. Tiene derecho a acceder con su @, a la comunidad, a opinar, a hacer balance extemporáneo de su gestión, pero a lo que no tiene derecho es a maltratar a nadie, levantar falsos testimonios, amenazar y mentir contra @DCoronell

No es cierto, como dijo alguna vez, que “quien afecte la libertad de un periodista y quien intercepte es enemigo del gobierno”. 

La verdad, Uribe, es que quien afecte y vulnere la libertad de expresión y el derecho a informar de un periodista o de cualquier ciudadano, es claramente enemigo de la sociedad y la democracia no solo colombiana, sino del mundo, y el mayor violador de derechos humanos que son universales. 

NOTA FINAL. 
El 22 diciembre pasado escribí en Twitter el Post titulado "Uribe se pasó otra vez de la raya con @DCoronell" (by @Bunkerglo), el cuál reproduzco aquí. Junto con otros tutiteros y de manera espontanea, promovimos y participamos el lunes 27 en la maratón  de solidaridad de trinos bajo el hashtag #apoyoacoronell, y en rechazo a los continuos ataques contra el periodista por parte de A. Uribe Vélez y algunos de sus seguidores. También se creó, bajo el mismo hashtag, un grupo de apoyo en facebook en la misma semana previa  a la maratón. La participación fue contundente a favor del periodista. En 60 minutos se producían 1900 trinos, es decir, un twett por cada dos segundos, según explicaba en un comunicado de prensa uno de los tuiteros convocantes.  El caso de Daniel Coronell se convirtió en trend#1, es decir en el primer tema de interés en Colombia para la comunidad twitter. Incluso días después de pasada la maratón, el periodista es motivo de solidaridad por parte de esta comunidad. Si considera que otros más deban leer esta reflexión de apoyo a @DCoronell haga RT y siéntase en la libertad de fijarla en su Blog si lo tiene.

domingo, 9 de enero de 2011

¿Como garantizar que lleguen recursos a personas damnificadas?


Nada es más urgente hoy en Colombia que garantizar que los recursos sagrados para las personas damnificadas, efectivamente llegan a estas y se cumpla el propósito para lo cual fuer recaudado dinero y comida.

Sin embargo, por no pocas razones son muchas las dudas sobre el manejo que pueda darse a los cuantiosos recursos financieros para atender la emergencia aportados por los colombianos en las varias y publicitadas teletones y entregados para esta causa por organizaciones nacionales e internacionales, varios países y el Estado mismo, además de las toneladas de alimentos y utensilios. Todo, sin duda, demanda de una sofisticada, pero no menos compleja y suprema organización gerencial y ejecutiva para la tarea más humanitaria que ha enfrentado el país después de la avalancha de Armero. 

Pasé por Ciénaga, Tasajera y Palmira en el depto. del Magdalena. Municipios costeros que han sido gravemente afectados, pero que no son los que peor están. Traté de pensar que se podría hacer para que uno de los miles de pesos y toneladas de comida pudieran llegar hasta allí a donde, si acaso, el alcalde del municipio consigue dar aliento a la población y a donde no se ve a nadie distinto, o mejor, del interior, apresurado en comenzar a resolver en el algo la situación. Imaginen nada más lo que será en los 129 municipios rivereños del Magdalena que están bajo el agua.  

Vi que los pobres de estos lugares -que son todos- están aún más pobres, más abandonados, más excluidos.   
Las obras en infraestructura son urgentes. Hay zonas que no se pueden volver a habitar así veamos a las personas viviendo entre el agua empozada, la basura, el calor infernal y sin agua potable. Los recursos siempre serán insuficientes para proteger a centenares de miles de niños de enfermedades, de hambre y de frio, todos derechos que no les fueron garantizados desde antes del temporal de agua y el desmadre de La Magdalena y otros ríos más.


El Estado y sus distintas entidades fijarán las políticas, harán los planes, implementarán las rutas a seguir, pero sus funcionarios solo estarán, si acaso, de paso en estos lugares luciendo inútiles botas pantaneras. No los veremos doblándose el lomo y pasando las dificultades que pasan los millones de pobladores que lo han perdió todo, que no era mucho, pero era con cuanto vivían. 

Tampoco lo harán los de los del PNUD y todos y cada uno de sus Programas de miseria que se han ido convirtiendo en entidades paraestatales, generadoras de asesores, consultores y analistas de escritorio que se comen los presupuestos de los países haciendo libros, cartillas, eventos y fotos para su propia vanidad. Así fue en Haití antes y después de la tragedia que hoy cumple un año. Pero también eso es y ha sido en Colombia históricamente en el ámbito de la salud, el saneamiento básico, los derechos sociales, la formación política... Puro discurso, papel, viáticos, fotos y lujosas agendas anuales que envían con puntualidad por correo certificado. 

La tarea recaerá, muy seguramente, en las Organizaciones No Gubernamentales y Sociales locales, de base, las que trabajan con las uñas y directamente con las comunidades, las que faciliten su organización y cuido, las que determinen las prioridades de atención y articulen lo municipal y departamental con lo local y nacional. Organizaciones que ya existan y no las que se inventen para atesorar recursos y desviarlos a las arcas de los candidatos de turno para las elecciones de octubre próximo.  

Es desde y para la gente. Por eso se requiere vincular a las mismas personas en los lugares, siempre hay lideres con los que se podría contar y que podrían hacerlo. El tendero, la madre comunitaria, la trabajadora social, el bachiller técnico, los jefes espirituales de las diversas iglesias... 

Estoy convencida que en sociedades más humanas la sociedad misma ha tenido un papel importante participando en acciones de atención y construcción. Porque aquí, la inmensa mayoría de las poblaciones no se puede reconstruir. Hay que hacerlo todo desde el principio y no como antes, sino en terrenos firmes, dignos, con saneamiento básico, con agua potable, con vías... 


¿Por qué no hacer que los jóvenes que tengan que prestar servicio militar los envien a hacer servicio social en esos lugares?  

¿Por qué no promocionar que las universidades exijan hacer pasantías a médicos, enfermeras, ingenieros, arquitectos, comunicadores, defensores de derechos humanos y todos los profesionales a las zonas de esta tragedia? 

¿Por qué no llamar a los miles de mujeres y hombres de la reserva de las FFMM a que vayan a combatir el hambre, la desnutrición y la enfermedad (que debe haberla, solo que ningún periodista ha llegado a esos lugares y estado más de una nota periodística) y le sirvan de manera efectiva a "la patria"? 

La prensa informó que "el pasado viernes, el Gobierno, a través del Fondo Nacional de Calamidades, anunció el giro de los primeros 145 mil millones de pesos para que desde las gobernaciones se brinde atención humanitaria a los damnificados. El 62 por ciento se destinará a los departamentos de la Costa Caribe".  

Daría pesar, dolor, pero sobre todo mucha rabia para alimentar la guerra que, en cuatro años o menos estemos leyendo titulares que señalen la apertura de investigaciones porque toneladas de alimentos que se perdieron, o por los dineros que fueron a dar a los bolsillos de los mismos u otros bandidos de la política mientras miles de personas murieron de esperanza y solidaridad mediática.

domingo, 12 de diciembre de 2010

Inxilio, el sendero de lágrimas

Es así. No se puede ver sin llorar un poco. El arte eleva la dignidad de los colombianos en situación de desplazamiento. El Coliseo El Campin ocupado a borde. ¿Los asistentes? Centenares de personas en situación de desplazamiento forzado, el 100% víctimas de esta maldita guerra interna. 

Entre los 200 caminantes en escena y los que asistían a la presentación habían mujeres y hombres de todas las edades, niños, viejos, jóvenes, blancos, indígenas, afrodescendientes, campesinos...


Fue afortunado que ya cuando salimos del Coliseo el deportivo Tolima anotara en el estadio El Campin el único gol del partido, pues la silbatina y gritos de un gol hubieran quebrantado la intima y sagrada ceremonia que vivíamos en este recinto cuya música, plástica y coreografía nos movía y conmovía todas las fibras del alma.

El bailarín, coreógrafo, pero sobre todo el pedagogo Álvaro Restrepo entregaba la historia de los caminantes, esos 4 millones de colombianos que han tenido que dejarlo todo luego de una masacre, un asesinato o la desaparición de un hijo, un hermano, un padre y su historia de vida en ese o en cualquier lugar de este paisaje nacional.
La muerte y la vida.  
 
Una sinfonía de lamentos y lamentaciones exorcizan y liberan del sufrimiento, pero no del olvido la tragedia inhumana del hombre de estas tierras. 
La voz, la música, los sonidos y la danza proporcionan las imágenes del horror, del miedo, del abandono y desesperanza vividas por estos millones de personas, en donde un asesinato, un desaparecido, una  masacre de hoy era aplastada, olvidada, borrada por otra que aparecida de la nada y del todo en esta larga y horrible noche que aún nos acompaña.

“El poeta (…) ha madrugado en una visión franca del país y lo registra como una memoria en tiempos del olvido. El inxilio, el exilio interior, es posible que lo asedie, pero aún le queda el exorcismo del poema”, dice Juan Manuel Roca.

Todo eso y más vemos, escuchamos, sentimos los espectadores que, por invitación de Álvaro no interrumpimos con ruidosos aplausos, sino que imperceptibles expresamos con el maravilloso lenguaje de los ciegos y así, fue más el tiempo que mantuvimos las manos alzadas  que abajo en las revolcadoras escenas acompañadas por el lirico dolor de la Soprano Sarah Cullins y la magistral Filarmónica de Bogotá.

Y la palabra. Esa que ata y nos libera, que hiere, pero también que acuna. Doce palabreros reunidos en círculo, de lenguas diferentes y representando a las más de 60 etnias y lenguas vivas que aún subsisten en Colombia, brindan una polifonía de rostros y rastros que hablan de la Madre Tierra, la Mujer, y nos advierten de una diversidad rica, pero también maltratada hasta  desaparecer.

La última imagen (ver en esta secuencia de fotos) fue demoledora. El nuevo y último trabajo Álvaro Restrepo convoca al cuerpo y al alma para transformar desde lo profundo, el dolor, el miedo, la pérdida pero no para olvidar, sino para dignificar a las víctimas.
Fue un privilegio estar esta tarde allí, como una más, entre las víctimas del desplazamiento forzado.



Fotos by Bun. Bogotá D.C., Coliseo El Campin. Diciembre 12 de 2010

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Gabriel Calvo Massi

"Mire la calle. Cómo puede usted ser indiferente a ese gran río de huesos, a ese gran río de sueños, a ese gran río de sangre, a ese gran río? 
Nicolás Guillén. 


A Gabriel Calvo Massi
Día Mundial de Lucha contra el VIH/Sida
Diciembre 1 de 2010   

Artista plástico que vivió y enfrentó con lucidez la discriminación y el rechazo en medio de una, aún muy precaria, atención en salud. 

Gabo nos abrió las puertas de su vida para conocer y comprender la dimensión de una situación de salud pública de la que apenas en 1991 el Ministerio de Salud se había empezado a ocupar. 

Lo conocí durante un almuerzo que preparó para mí en su piso de Chapinero. Lo visité como funcionaria del MinSalud en donde era Jefe de comunicación y prensa. Conversamos toda la tarde. Mi inconsciente miedo desapareció entre preguntas, asombros, risas y abrazos.  

Desde esa tarde nos acompañó en todas las iniciativas de prevención, primero desde el Ministerio, y poco después desde Apoyémonos. 

Caminamos también con él hasta que regresó al agua en la sagrada laguna de Guatavita en una corta travesía en barquitos de papel amarillos, rosados, verdes, azules...      

Han pasado casi 20 años y aún sigue siendo un poco tabú saber de personas viviendo con el VIH/Sida. La discriminación sexual sigue enervada. El aprendizaje sigue siendo lento y doloroso. La atención defificiente.    

Cuando creamos la ONG Apoyémonos, Gabo nos acompañó al combo de profesionales, casi todos entre sí amigos, para poner el tema en la mente y corazones de la gente. 

El talento y conocimiento de Manuel Velandia Mora, quien para ese entonces ya era un notable conocedor en prevención de enfermedades de transmisión sexual y SIDA, fueron un faro en el recorrido. 

Mirando hacia el cielo Gabo en medio de la muchedumbre que camina indiferente, una foto del también fotógrafo Rafael Baena. 

La imagen forma parte de uno de seis carteles de prevención e información de la Campaña "Impacto de opinión pública" que Apoyemonos desarrolló. Era directora y formaba parte de un extraordinario grupo de personas sensibles, creativas y solidarias.  

Diciembre 1 de 2010 

martes, 9 de noviembre de 2010

Con noticias así, es una maldición y verguenza humana ser colombiana

La falta de autoridad ética y moral junto con la incompetencia en materia de derechos humanos de @AlvaroUribeVel y su gobierno, quedó en evidencia y fue cuestionada por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (también denominado Tribunal de Estrasburgo y Corte Europea de Derechos Humanos con sede en Francia), al proteger los derechos humanos del mercenario israelí de casi 70 años, Yair Klein y con ello impedir su extradición a Colombia para cumplir una condena de 10 años y 8 meses de prisión impuesta por el Tribunal Superior de Manizales en el 2001, por entrenamiento de grupos terroristas y concierto para delinquir según nos recuerda en su noticia @eltiempocom

Seguro que como a muchos, muchísimos más colombianos, especialmente las víctimas de los horrores de Klein, me duele, me rasca y me pica. No salimos del asombro, pero no por cuenta de la decisión de la máxima autoridad judicial para la garantía de los derechos humanos y libertades fundamentales de toda Europa. El desconcierto es por la suprema incompetencia del mentecato, mostrenco e ignaro Pachito (@fsantosRCN), encargado del programa de DDHH del país, que junto con la FGN, la Cancillería, los embajadores en Francia y Rusia, el DAS (bueno, ocupado en otros menesteres al servicio de la empresa autoritario y criminal ya sabemos de quien), y todos cuanto tenían que intervenir como el mismo @AlvaroUribeVel desde agosto de 2007, les quedó grande e imposible la tarea. Pero todavía peor: ayudaron a que no fuera posible extraditar de Rusia al detenido por la Interpol en agosto de 2007 el criminal Yair Klein.

Esta "cortesita" como escuché decir en la radio, desde 1998 trabaja bajo el Protocolo 11 del Convenio para la Protección de los Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales. Es un tribunal internacional al que puede acudir cualquier persona que considere haber sido víctima de una violación de sus derechos reconocidos por el Convenio para la Protección de los Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales. Y esto fue lo que consideró el abogado del Yair Klein: que entre otras, la declaración del entonces Vicepresidente de Colombia de querer extraditar a Klein para "que se pudra en la cárcel" solo ratifica una intención, sino una realidad. Dicho de otro modo: también sabemos que los derechos humanos no son respetados, tampoco, en las prisiones colombianas. Bueno, los derechos de algunos, porque los paramilitares de Uribe gozan de todo tipo de prebendas (celulares, computadores, rumbas, almuerzos, mujeres).

Seguramente el senador del PDA @IvanCepedaCast veía venir que esto ocurriría e hizo un intento en vano.  Pues aunque consiguió en septiembre pasado aprobar una proposición de la Comisión Segunda de la Cámara de Representantes para que se le solicitara al Gobierno Nacional insistir ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos sobre la extradición a Colombia del coronel israelí  Yair Klein.

Como en Colombia la impunidad no es una excepción sino una norma, una vez más las víctimas de los múltiples crímenes de lesa humanidad cometidos en la década de 1980 por Yair Klein con complicidad, ayuda y participación del ejército colombiano, perdieron otra vez su derecho a la verdad, a la justicia y a la reparación. Desde ese entonces, el asesinato, las masacres y la desaparición de líderes de la izquierda y de los derechos humanos son víctimas del Estado colombiano.

Con noticias así, es una maldición y verguenza humana ser colombiana.

Fotos by Bun. Marcha contra el paramilitarismo. Bogotá D.C., Febrero 6 de 2008.